Alicia y Marcelo se conocen en un concierto de rock. El amor surge inmediatamente entre ellos, pero el retorno del novio de Alicia provoca la separación. En 1982, en Madrid, sus caminos vuelven a cruzarse. Tras el encuentro, se dan cuenta de que, a pesar de que el amor sigue latente, sus destinos discurren por rumbos separados. Años después, en 1990, tras otro encuentro casual, Marcelo decide hacer frente a sus sentimientos por Alicia: ambos quieren hacer realidad su sueño postergado desde la adolescencia.