El doctor Frankenstein, con la ayuda de una joven pareja a la que chantajea, secuestra al doctor Brandt, un antiguo colega suyo que se encuentra recluido en un manicomio. Su propósito es obtener una importante información médica que sólo él puede proporcionarle; pero Brandt muere y, entonces, Frankenstein decide trasplantar su cerebro a otro cuerpo.