Después de escuchar de Rosso y Bianco que Milán es el próximo destino de Nadja, Herman reafirma su objetivo de incomodar al ducado de Preminger. En el último día de la compañía, el baile de Nadja y Kennosuke es un éxito entre la audiencia. La decisión de George de pasar el día siguiente haciendo turismo hace que Nadja busque a Victorio Capuletti, mientras que Herman usa a Rosso y Bianco para capturarla. Kennosuke comenzó a llamar a Nadja "mi pequeño capullo de rosa", lo que la molesta. Leonardo invita a Nadja a visitar su oficina al final de la jornada laboral; mientras Herman, Rosso y Bianco la persiguen, Leonardo se entera de que Antonio tiene información sobre Victorio cuando le cuenta a Antonio sobre Nadja. Herman y Nadja se conocen sin reconocerse, y ella descubre que Victorio no solo no conoce a su madre, sino que también ha sido aplastado económicamente por Antonio.