El comandante Salas va a la cárcel a visitar a Felipe y trata de buscar alguna pista sobre el paradero de Francisco, pero el preso insiste en que su amigo es inocente. Por otro lado, Rosario trata de ayudar al mexicano con su traje de mariachi para que comience a trabajar en Garibaldi. Más adelante, Francisco recibe un correo de su padre en el que le manifiesta su preocupación.